CIBERADICCION: LA PATOLOGIA DEL NUEVO SIGLO
La ciberadicción, también conocida como trastorno de adicción a Internet (IAD)
La ciberadicción es un fenómeno que se ha observado en personas de todas las edades y que se caracteriza por un uso excesivo de Internet, a través de diversos dispositivos, que interfiere con la vida diaria. Los síntomas más comunes de la ciberadicción incluyen la necesidad compulsiva de conectarse con frecuencia, la dispersión de la atención, la búsqueda constante de contenidos relacionados con ciertos gustos o adicciones, la creación de múltiples identidades, la sustitución de lo real por lo vivido en entornos virtuales, la pérdida de la noción del tiempo y alteraciones en el humor y el comportamiento.
Debemos ser conscientes de que la adicción a Internet no es
una adicción en sí misma, ya que Internet no es una sustancia tóxica. Son las
personas que la utilizan las que pueden hacer que se vuelva tóxica. Según un
estudio realizado por la ONG Protégeles, el 21,3% de los jóvenes se encuentra
en riesgo de convertirse en adictos a las nuevas tecnologías y el 1,5% ya lo
es.
Las consecuencias de la ciberadicción pueden ser graves, y pueden incluir fracaso escolar o laboral, tendencia al aislamiento, agresividad y alteraciones de la conducta. Como profesionales de la salud, es importante que seamos conscientes de los riesgos de la ciberadicción y que trabajemos para ayudar a aquellos que luchan contra este problema. Además, debemos fomentar un uso responsable y equilibrado de Internet y las nuevas tecnologías en nuestra vida diaria.
Las consecuencias de la ciberadicción son,
entre otras, las siguientes:
- Fracaso
escolar o laboral.
- Tendencia
al aislamiento.
- Agresividad.
- Alteraciones
de la conducta.
Cada vez más común
La adicción a Internet o ciberadicción es un fenómeno que se
ha vuelto cada vez más común en nuestra sociedad actual, especialmente entre
los jóvenes. La facilidad de acceso a Internet y la gran cantidad de
información y entretenimiento disponible en línea han llevado a que muchas
personas pierdan el control frente al uso racional de la red.
Como profesionales de la salud, es importante que sepamos
identificar los signos y síntomas de la ciberadicción. Entre ellos, se
encuentra el uso excesivo de Internet, que puede interferir con las actividades
diarias de la persona y hacer que descuide sus responsabilidades y deberes.
También pueden presentarse síntomas físicos, como dolores de cabeza, fatiga
ocular, dolor de cuello y espalda, entre otros.
La ciberadicción puede tener múltiples consecuencias
negativas para la persona, tanto a nivel físico como psicológico. En el plano
físico, puede afectar el sueño, la alimentación y la actividad física, lo que a
su vez puede aumentar el riesgo de padecer enfermedades crónicas. A nivel
psicológico, puede llevar a la ansiedad, la depresión, la baja autoestima y el
aislamiento social.
Es importante destacar que Internet y las nuevas tecnologías
no son malas en sí mismas. De hecho, pueden ser muy útiles y beneficiosas en
muchos aspectos de nuestra vida. El problema surge cuando hacemos un uso
excesivo e inadecuado de ellas, y cuando empezamos a utilizarlas como un fin en
vez de como un medio para alcanzar nuestras metas y objetivos.
Cuáles son las causas de la ciberadicción
según Boronat (2008), internet facilita cubrir
o compensar un déficit en la personalidad del adicto; es un instrumento de
comunicación interpersonal. El mundo virtual puede considerarse una vía de
escape del mundo real para los adolescentes o para personas que tienen problemas
en las habilidades sociales, por ejemplo,
y en algunos casos llega a convertirse en un sustituto de la vida real. Se
puede decir que las redes cubren dos tipos de necesidades básicas en los
adolescentes:
1) conseguir
que puedan sentirse bien y acompañados a través de juegos, imágenes e
información, sin tener la necesidad de comunicarse con otras personas y
2) la búsqueda de interacción social.
Hay muchas
personas que tienden a sufrir este tipo de adicción ya que padecen de depresión
o, por el contrario, se sienten atraídas por el mundo virtual y la gran
variedad de posibilidades que brinda, como pueden ser el anonimato o ejercer
roles opuestos a la vida cotidiana. En otras personas que buscan alguna
relación, las redes les permiten entablarlas con más facilidad.
Según
Carbonella (2011), la ciberadicción es más común en la adolescencia, etapa en
la que internet hoy por hoy es uno de los principales medios de socialización.
Según un estudio realizado por la Fundación Pfizer, el 98% de los jóvenes de 11
a 20 años es usuario de Internet. Y de este porcentaje, 7 de cada 10 afirman
acceder a la red por un tiempo diario de 1,5 horas. Es por esto que los
adolescentes, dado que suelen conectarse más a internet, constituyen un grupo
de mayor riesgo.
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La vida de un ciberadicto es afectada totalmente, convirtiéndose en un problema para él y para las personas de su entorno.
En toda adicción siempre existen tres
elementos: una persona, unas circunstancias personales determinadas y una
sustancia o situación que produzca placer. Que una persona pase muchas horas
conectadas a internet no quiere decir que tenga adicción, tenemos que conocer
las circunstancias personales y el motivo por el que está tantas horas frente a
la computadora.
¿Cuándo podemos considerar que una persona
tiene una adicción a internet? ¿Cuáles
son los signos de alarma? Según Young(2011), los signos de alarma son:
- Estar conectado a la red
todo el día, privándose así de horas de descanso.
- . No prestar atención normal
y adecuada a temas importantes o a otras actividades como suelen ser el
contacto con la familia o amigos.
- . No dejar de pensar en la
red aun sin estar conectado a la red.
- . Bajar el rendimiento en
los estudios.
- . No querer relacionarse con
otras personas o mostrarse irritable.
- . Sentirse excesivamente
eufórico cuando se está delante de la computadora.
Además de los anteriores, también puede haber signos físicos que muestren que una persona tiene ciberadicción.
La ciberadicción es un fenómeno complejo que puede tener múltiples causas
Según algunos expertos, Internet y las redes sociales pueden ser una herramienta que facilite cubrir o compensar un déficit en la personalidad del adicto, ya que les permite comunicarse de manera anónima e impersonal.
Para algunos adolescentes y personas con problemas en las habilidades sociales, el mundo virtual puede ser una vía de escape del mundo real y puede llegar a convertirse en un sustituto de la vida real. Las redes sociales pueden cubrir dos tipos de necesidades básicas en los adolescentes: la necesidad de sentirse acompañados a través de juegos, imágenes e información sin la necesidad de comunicarse con otras personas, y la necesidad de interactuar socialmente.
Además, existen personas que sufren de depresión u otros problemas emocionales y que encuentran en Internet una forma de escape y de distracción. También hay quienes se sienten atraídos por el anonimato y las posibilidades que ofrece el mundo virtual para ejercer roles opuestos a los de su vida cotidiana. Por otro lado, las redes sociales pueden ser una herramienta útil para las personas que buscan establecer relaciones sociales y hacer nuevos amigos.
Es importante destacar que la ciberadicción no tiene una única causa y puede ser el resultado de la interacción de diversos factores. Por lo tanto, es fundamental que como profesionales de la salud estemos capacitados para identificar los signos y síntomas de la ciberadicción y brindar la ayuda necesaria para que las personas afectadas puedan recuperar el control de su vida.
Por lo tanto, es fundamental fomentar un uso responsable y equilibrado de Internet y las nuevas tecnologías, especialmente entre los jóvenes. Debemos educar a las personas sobre los riesgos y consecuencias de la ciberadicción y brindarles herramientas y recursos para que puedan hacer un uso saludable y consciente de la tecnología.
En conclusión
La ciberadicción es un problema que se ha vuelto cada vez
más común en nuestra sociedad actual, especialmente entre los niños y jóvenes.
Esta adicción puede tener graves consecuencias en la integridad física y
emocional de quien la padece, así como en su entorno familiar y social.
Es importante prevenir la ciberadicción en los niños y
jóvenes a través de la educación y la conciencia sobre los riesgos y
consecuencias del uso excesivo e inadecuado de Internet y las nuevas
tecnologías. Los padres y educadores deben estar atentos a los signos y
síntomas de la ciberadicción y brindar a los niños y jóvenes herramientas y
recursos para que puedan hacer un uso responsable y equilibrado de la
tecnología.
Es fundamental que como sociedad trabajemos juntos para
prevenir la ciberadicción y brindar ayuda a quienes ya la padecen. Los
profesionales de la salud deben estar capacitados para identificar y tratar la
ciberadicción, y se deben implementar políticas públicas que promuevan un uso
saludable y responsable de Internet y las nuevas tecnologías en nuestra vida
diaria.
En resumen, prevenir la ciberadicción es una responsabilidad
compartida de la sociedad en su conjunto, y debemos trabajar juntos para crear
un ambiente en el que podamos hacer uso de las nuevas tecnologías de manera
segura y saludable.
Autor
Pedro Vallejo
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